Ante el frío reinante la recomendación de los médicos es salir a la calle abrigados, pero en el caso de quienes están en situación de calle, a la intemperie, su estado suerte parece estar echada a lo que pueda surgir de alguna acción solidaria. Este es el caso de la ONG «Un plato caliente» que en las crueles y duras noches tucumanas sale al «rescate» de quienes más necesitan un abrigo o un sustento alimenticio.
Al respecto, Ezequiel Medina manifestó a Ruth Oscari para «El Aire de la Mañana», que «la verdad que en esta época del año nuestra tarea se vuelve muy cruel, porque en el estado que encontramos a la gente en situación de calle es calamitosa».
«Ver a esta gente bajo el frío o cuando llueve, es muy duro. Se torna hasta cruel para nosotros que hacemos todo lo que podemos, pero que sabemos que es insuficiente para sacarlos de esta situación extrema, porque de seguir así terminarán muriendo de frío o por alguna enfermedad», apuntó.
Medina admitió que no hay más gente en situación de calle, «gracias a Dios», pero precisó que por problemas económicos si hay más gente que concurre a los comedores comunitarios.
En cuanto a la ayuda que recibe la organización, explicó que «resulta del aporte privado, comerciantes y algunas personas que en forma anónima nos acercan los recursos suficientes para asistir lo que más lo necesitan». Criticó que no haya una mayor participación del Estado, provincial y nacional, y que toda la ayuda dependa en gran medida de la solidaridad de la gente común.
El hecho más grave que denunció Medina, es lo que atravesaron cuatro personas en situación de calle que estaban en la esquina de Santiago y Juan José Passo, a quienes los expulsaron del lugar a fuerza de golpes.
